Ergonomía en la oficina: El secreto para trabajar mejor y vivir sin dolor

Más de 6 horas

al día pasamos sentados en la oficina.

Hasta un 25%

de aumento de productividad en un entorno ergonómico.

Hasta un 50%

menos de lesiones en una oficina pensada ergonómicamente.

¿Sientes que tu espacio de trabajo te pasa factura?

La falta de ergonomía en la oficina afecta tu salud física y mental, limitando tu capacidad para disfrutar y dar lo mejor de ti cada día.

Mujer con dolor lumbar mientras trabaja en la oficina

Dolores en la espalda, cuello o muñecas, fatiga constante y disminución en tu rendimiento son señales claras de que algo no está bien.

¿Por qué cuidar la ergonomía es esencial en la oficina?

La ergonomía es la ciencia que estudia cómo adaptar el entorno de trabajo a las necesidades físicas y mentales de las personas.

Una oficina ergonómica no solo protege tu salud, sino que también impulsa tu bienestar y productividad.

Mujer sentada en su escritorio con una postura ergonómica correcta frente al ordenador

La ergonomía busca adaptar el entorno de trabajo a las necesidades de tu cuerpo, no al revés.

Esto implica optimizar la postura, el mobiliario y las herramientas para minimizar el estrés físico y prevenir lesiones.

Beneficios de la ergonomía en la oficina

  1. Prevención de lesiones:
    • Reduce el riesgo de problemas musculoesqueléticos.
  2. Mayor comodidad:
    • Trabajar en un entorno adaptado a ti elimina molestias innecesarias.
  3. Incremento de la energía:
    • Mejora la circulación y evita la fatiga.
  4. Productividad sostenida:
    • Elimina las distracciones provocadas por el malestar físico.
  5. Mejor concentración:
    • Un entorno ergonómico favorece un enfoque más profundo en tus tareas.

Factores clave en una oficina ergonómica

  1. Silla adecuada:
    • Con soporte lumbar, altura ajustable y asiento acolchado.
    • Según la Mayo Clinic, una silla que apoye las curvas de la columna vertebral y permita que los pies descansen planos en el suelo es esencial para una postura saludable.
  2. Escritorio a la altura correcta:
    • Permite mantener los codos a un ángulo de 90°.
  3. Monitor a nivel de los ojos:
    • Evita la tensión en el cuello.
  4. Posición del teclado y ratón:
    • Ubícalos para mantener las muñecas en una postura neutra.
  5. Descansos regulares:
    • Cambia de postura y realiza estiramientos cada 30-60 minutos.
Portada de la NTP 242 sobre ergonomía del Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo

Si quieres ampliar la información, descárgate esta nota técnica sobre ergonomía del INSST (Instituto nacional de seguridad y salud en el trabajo), en la nota técnica descargable, se pretende realizar un análisis ergonómico en oficinas con el fin de determinar los factores de influencia y cuales deben ser sus valores para conseguir el confort y por lo tanto la eficacia en el trabajo.

Consejos para mejorar la ergonomía en tu oficina

  1. Invierte en una silla ergonómica:
    • Asegúrate de que tenga ajustes para adaptarse a tu cuerpo.
  2. Configura tu escritorio:
    • Mantén el monitor a una distancia de 50-70 cm de tus ojos.
    • ViewSonic destaca la importancia de ajustar la altura del monitor para que la parte superior de la pantalla esté al nivel de los ojos, reduciendo la tensión en el cuello.
  3. Usa un soporte para pies:
    • Ayuda a mantener una postura adecuada y mejora la circulación.
  4. Haz pausas activas:
    • Realiza estiramientos simples para aliviar la tensión muscular.
  5. Revisa tu postura regularmente:
    • Siéntate con la espalda recta y los pies apoyados en el suelo.

Beneficios de mejorar la ergonomía en tu oficina

Cuando ajustas tu espacio de trabajo de forma ergonómica, mejoras tu calidad de vida.

Experimentarás menos molestias, aumentarás tu energía y disfrutarás de un mejor desempeño en tus tareas.

Además, prevenir lesiones ahora significa ahorrar tiempo y recursos en el futuro.

Mujer trabajando sobre una bicicleta estática frente al escritorio

Ajustar tu espacio de trabajo a ti significa modelarlo según tus preferencias, tus gustos, tu actividad,…, al fin y al cabo, tu forma de ser.

  1. Identifica las áreas que te causan incomodidad.
  2. Empieza por aquellos cambios más sencillos de aplicar para sentir los resultados.
  3. Consulta en nuestro blog los mejores productos y prácticas para crear un espacio ergonómico.